Por Redacción
La Patrulla Fronteriza comenzó a tomar las huellas digitales e identificar a través del iris ocular a migrantes menores de 14 años, con el fin de detectar posibles actos de explotación infantil y poder corroborar la identidad de las personas, informó la agencia federal.
Entre el pasado 1 de octubre y 30 de marzo se identificó a más de 2 mil 700 personas en la frontera con México que afirmaron ser parte de una familia sin que eso fuera verdad.
“Estamos tomando las medidas para detectar la trata de personas, establecer la identidad de un menor e identificar al adulto que lo acompaña para estar seguros que es en verdad su padre o tutor legal”, señaló la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
La Patrulla Fronteriza en los sectores del Valle del Río Grande (Texas) y Yuma (Arizona) ya comenzó a recopilar datos biométricos de menores de 14 años, esto incluye huellas dactilares, fotografías y cuando es posible la identificación del iris ocular, así como información comparativa con bases de datos nacionales e internacionales.
Según la agencia federal, por el momento no se han implementado las pruebas genéticas de ADN, las medidas se aplican según el caso y que existan sospechas de que el menor puede ser una víctima de la trata de personas.