Erika De la Cruz

Se ha puesto a pensar que la mayoría de los seres humanos estamos todo el tiempo con los celulares, con la computadora, con la televisión. La tecnología nos invade por todos lados ¿Pero la necesitamos? ¿Piensa que cada vez somos más dependientes? ¿Cuál será el futuro de nuestra relación con la tecnología? En un mundo tecnológico en el que ha surgido una dependencia de los aparatos, los celulares y la tecnología son herramientas básicas y vitales para encajar en la sociedad; ya no podemos vivir despegados de estos aparatos, el teléfono móvil, por ejemplo, es casi como nuestro “mejor amigo”. No obstante, la dependencia no es una cualidad recomendable para sentirnos orgullosos, porque nos impide vivir y disfrutar nuestro entorno, de todo aquello que sí tiene vida. La mayoría de las personas interactúan con las pantallas por lo menos ocho horas al día, más tiempo del empleado en cualquier otra actividad, incluyendo dormir. Lo peor de todo, esta cultura crece cada día más, rompe con las barreras de todas las edades y alcanza todos los niveles de la sociedad, limitando cada día más las relaciones interpersonales y reemplazandolas por una interacción virtual. Es habitual que grupos de amigos que estén más pendientes del teléfono que de la conversación o de la gente; incluso en sus horas laborales pierden a menudo la concentración debido a la incapacidad de utilizarlo. Hay un nombre para esa enfermedad: la nomofobia (miedo incontrolable a salir de la casa sin el teléfono móvil). Algunos de sus síntomas más frecuentes son no apagar nunca el celular, llevarlo a todos lados, usarlo en el trabajo, o hasta dormir con él. Al llegar a este punto, es recomendable acudir con especialistas que proporcionen la ayuda necesaria para superar esta dependencia.  Sin embargo los jóvenes, quienes más utilizan el móvil y a los que más les cuesta separarse de él, en esta nueva era se les hacen imprescindibles las nuevas tecnologías, son los que más conocimiento y mejor preparacion tienen.  La adicción al teléfono y la nomofobia constituyen un fenómeno en auge que puede llegar a ser uno de los grandes problemas de la sociedad moderna.  Para prevenir diversas adicciones, los expertos recomiendan vigilar el uso de esta tecnología en niños y adolescentes, permitiéndoles solamente su uso por un lapso no mayor a dos horas al día ¿Usted que piensa?  Bendiciones.