Las estrellas progresivas demócratas pudieron haber ganado, pero sólo sacaron un empate en el segundo debate nacional de aspirantes a la candidatura presidencial.

Frente a un campo de demócratas más centristas que los seguía en las elecciones primarias presidenciales de 2020, Bernie Sanders y Elizabeth Warren, se quedaron sin armas en el debate del martes para defender una de sus a grandes propuestas plan de seguro de salud “Medicare para todos” y otros cambios “audaces y progresivos” a la política pública.

En todo caso, parecían vulnerables al fuego más amigable de sus compañeros demócratas: Warren y Sanders fueron emboscados antes de que pudieran hablar.

“Podemos seguir el camino que el senador Sanders y el senador Warren quieren llevarnos, que tiene malas políticas como Medicare para todos, liberar todo y promesas imposibles que alejarán a los votantes independientes y harán que Trump sea reelegido”, dijo el representante John Delaney, propietario de un promedio de 0.7 por ciento en las encuestas recientes.

En el transcurso de las siguientes dos horas, Warren y Sanders insistieron en que solo los cambios radicales que cambiarían fundamentalmente las estructuras políticas y financieras motivarían a los votantes a ir a las urnas y mejorar sus vidas.

“Estas compañías de seguros no tienen el derecho otorgado por Dios de obtener 23 mil millones en ganancias y extraerlo de nuestro sistema de atención médica”, dijo Warren.

Y el campo contrarrestó la forma en que lo hizo el representante Tim Ryan, demócrata de Ohio, cuando criticó la explicación de Sanders de la propuesta de Medicare para Todos porque sacaría a los trabajadores sindicales de los planes de seguro privado.

“Es una mala política”, dijo Ryan.

Los estrategas demócratas que observaron el ir y venir entre las dos partes ideológicas del partido dijeron que era difícil decir cuál ganó.

“Hay una lucha clara por el alma del partido, simplemente no está claro, según este debate, quién está ganando”, dijo Chris Kofinis, quien ha trabajado en campañas presidenciales demócratas en ciclos electorales pasados.

Encuestas recientes sugieren que, juntos, Sanders y Warren tienen alrededor de un tercio del electorado primario detrás de ellos, lo que está en línea con la participación que favorece al líder y ex vicepresidente Joe Biden.

Pero no hay otros candidatos en la carrera que sean tan progresivos en los temas o tan agresivos en su tono para grandes cambios como Warren y Sanders.