Al señalar la separación de familias y retención de niños migrantes como un práctico “secuestro” y que actualmente existen 17 demandas en contra de la administración Trump por su política de cero tolerancia, la Coalición para Desenjaular y Reunir Familias (URFC, por sus siglas en inglés) hizo un llamado de atención a los legisladores tanto estatales como federales para una solución definitiva al problema.

Al enumerar una serie de violaciones a las leyes estadounidenses y a los acuerdos internacionales, la abogada Diane Post no dudó en llamar “secuestro” a la acción de mantener a los niños retenidos en refugios privados, mientras los padres fueron deportados.

Esther Durán-Lumm, vocera de URFC, señaló que la separación de niños se sigue dando en la frontera pese a que jueces federales ordenaron parar y reunir a las familias y prueba de ello es que se siguen abriendo refugios para pequeños desde apenas meses de edad.

“Actualmente no tenemos la información precisa de cuántos niños hay retenidos en refugios porque se han negado a darla, pero solamente el recientemente reabierto de Southwest Key en el centro de Phoenix, tiene a más de 400 y hay 17 de estos centros en Arizona, sin contar otras organizaciones”, señaló Durán-Lumm.

Se hizo hincapié en la operación de éstos refugios en los que se ha denunciado desde abuso físico hasta sexual en contra de los menores migrantes y a pesar de haber sido cerrados temporalmente, recibieron el permiso del Departamento de Salud de Arizona para reabrir.

“Igualmente los legisladores republicanos de Arizona desecharon la petición que hicimos de un comité ciudadano que pudiera monitorear las actividades en los refugios de niños para evitar más atropellos”, agregó la activista.

Entre otros temas se trató el hecho de que la administración Trump ha enfocado todo su poder en detener la migración de los países vecinos del sur de América, pero no ha hecho lo suficiente para contener el flujo europeo.

Al señalar sobre la regla de Tercer País Seguro, señalaron que ninguno de los países al sur de la frontera pueden ser considerados como seguros y que se ha pisoteado la dignidad de los vecinos, además de considerar como indeseables a las organizaciones de apoyo a migrantes.

Por su parte Roberto Reveles de Somos América, tocó el tema de la detención y el trauma causado por la separación continua de los niños de sus padres o familias.