La animadversión del sindicato de policías en contra de la alcaldesa Kate Gallego siempre ha sido evidente, pero tras el despido de cuatro oficiales, parece estar llegando a niveles preocupantes, al grado de que la acusan de “fomentar una guerra” en su contra.
Los líderes de la Asociación de Agentes del Orden de Phoenix (PLEA, por sus siglas en inglés) lanzaron la acusación a la vez que analizan la realización de un voto de desconfianza en contra de Jeri Williams, jefa del Departamento de Policía, según ha trascendido.
En una transmisión, el Presidente de PLEA, Michael Brit London, dijo que “el jefe ha perdido el departamento”, pero que un voto de no confianza es una tarea complicada.
Un voto de no confianza por sí solo no puede eliminar a Williams y sólo dividirá más al Departamento de Policía de Phoenix, pues la última palabra la tiene el administrador del Ayuntamiento, Ed Zuercher.
PLEA está llevando a cabo reuniones para “discutir las recientes decisiones disciplinarias de la Jefa Williams y el papel que la alcaldesa Gallego y el Concilio Municipal están jugando en la guerra contra los policías”, dice un correo electrónico.
Se menciona el reciente despido del oficial Christopher Meyer, que apuntó con su arma a una familia afroamericana con niños pequeños y también amenazó con dispararle a la prometida embarazada del hombre.
También menciona el despido del detective Clinton Swick, quien perdió su trabajo después de que los investigadores evidenciaran sus publicaciones en Facebook con sentimientos anti-musulmanes y racistas.
“Con el despido del oficial Meyer y el detective Swick, debería reconocerse que ellos y nuestro departamento ahora son víctimas de los progresistas radicales que influyen en los líderes de nuestra ciudad”, dice el correo electrónico.
El sargento Daniel Beau Jones también fue despedido mientras es investigado penalmente y se ha enfrentado a múltiples demandas por acoso sexual y conducta inapropiada en el trabajo, aunque ese caso no es mencionado por el Sindicato.
PLEA ha especulado que el Ayuntamiento no se preocupa por los policías de Phoenix, y compartió una página de GoFundMe para los oficiales en desgracia.
Mientras tanto, Marcos Rodríguez, otro oficial que estuvo involucrado en una demanda por conducta sexual inapropiada, fue despedido el mes pasado, aunque apenas fue anunciado.
En julio, la ciudad de Phoenix llegó a un acuerdo para resolver una demanda alegando que Rodríguez acosó a una mujer que fue a los tribunales y le costó al Ayuntamiento 125 mil dólares para cerrar en el caso, según informes de la prensa.
Según la denuncia, el encuentro provocó que la mujer tomara medicamentos para la depresión, la ansiedad y el insomnio y se mudara de su departamento para que Rodríguez no pudiera encontrarla.
Apoyo para Williams
Por su parte los concejales Carlos García y Michael Nowakowski, así como la alcaldesa Kate Gallego han externado su completo apoyo a Jeri Williams al frente del Departamento de Policía.
“Aunque lo sentimos por sus familias, los despidos de los agentes están completamente justificados, porque no se pueden tolerar ese tipo de acciones, aun cuando se moleste el sindicato”, dijo Carlos García, concejal del Distrito 8.
Las acciones disciplinarias vienen después de una serie de airadas protestas ciudadanas en contra de los agentes que excedieron el uso de poder o bien, realizaron acciones que van contra los principios de la corporación.
Williams además de tomar acciones correctivas, ha iniciado con un proceso de transparencia al hacer públicos a través de las redes sociales los videos de las cámaras corporales de los agentes en casos que han causado polémica.
“Elogio a la jefa Williams y su equipo por dar este paso proactivo, que brinda una mayor transparencia y responsabilidad a nuestros residentes, este es un primer paso para restablecer la confianza con la comunidad a la que servimos”, dijo el concejal del Distrito 7, Michael Nowakowski.
