Gene Lee, fue asesinado en el cumplimiento de su deber después de ser atacado por un recluso en la Cárcel de Lower Buckeye el 30 de octubre.

En una solemne ceremonia, familiares y amigos se reunieron el pasado fin de semana en el Teatro Comerica para presentar sus respetos a un hombre reconocido como representante de las mejores cualidades de un profesional de la ley.

El oficial de detención de la Oficina del Sheriff del Condado de Maricopa (MCSO, por sus siglas en inglés) Gene Lee, fue asesinado en el cumplimiento de su deber después de ser atacado por un recluso en la Cárcel de Lower Buckeye el 30 de octubre.

Lee, o Jimmy, como sus amigos se referían a él, fue recordado no solo como un brillante ejemplo de servidor público, sino también como un amoroso esposo y padre.

La aplicación de la ley fue una segunda carrera para Lee, pues trabajó la mayor parte de su vida como ingeniero eléctrico.

“Cuando un oficial es asesinado, no es una agencia que pierde a un oficial; es la comunidad y toda la nación”, dijo dijo Kevin Parmenter, un viejo amigo de Lee.

Lee también fue recordado por la impresión que dejó en quienes sirvieron con él.

“Lo he experimentado yo mismo y muchos otros también”, recordó el oficial Kyle Reiniger, que trabajó con Lee en la cárcel de Lower Buckeye.

“Era un alma amable y amorosa y, sinceramente, era desinteresado. Era la descripción del desinterés”, dijo por su parte Paul Penzone, sheriff del Condado de Maricopa, quien hizo entrega de la bandera estadounidense a la familia Lee.

A la edad de 64 años, Lee deja a una esposa, dos hijos y dos nietos.

Durante la semana se realizaron varios actos para la recaudación de fondos para cubrir los gastos funerarios y se siguen aceptando donaciones que pueden hacerse a través de la Oficina de Alcance Comunitario de la Oficina del Sheriff del Condado de Maricopa.