El Río Salado es de gran importancia en el ecosistema arizonense, por ello los esfuerzos por restaurar la vegetación nativa.

La restauración de la vegetación nativa en el bajo cause del Salt River o Río Salado ayudará a proteger los suministros de agua de ciudades como Mesa y Scottsdale, además que ayudará a reducir el riesgo de incendios y sedimentación de alta severidad, y mejora la experiencia al aire libre de miles de visitantes cada año.

Es por ello que el próximo sábado 7 de diciembre los gobiernos municipales de Phoenix y Scottsdale, en conjunto con National Forest Foundation, la administración del Bosque Tonto y la Northern Arizona University, realizarán un evento con la ayuda de voluntarios para restaurar la vegetación nativa, todo inicia en punto de las 8:00 de la mañana y terminará a las 2:00 de la tarde.

Cabe recordar que el Río Salado es una fuente crucial de agua, vida y belleza para Arizona, ya que actúa como una arteria principal en toda la cuenca y para los suministros de agua de la ciudad en el Valle del Sol.

El río Salado no solo proporciona un suministro de agua limpia y renovable, sino también un hábitat de vida silvestre vibrante y exuberante y muchas oportunidades de recreación para pescadores, navegantes, observadores de aves y muchos otros.

Sin embargo, la función y la salud del río se han degradado en las últimas décadas, impactadas en gran medida por especies de plantas no nativas, que compiten y utilizan más recursos hídricos que la vegetación nativa.

Las ciudades de Scottsdale y Phoenix son socios clave para apoyar este valioso trabajo en Lower Salt River, y como parte del programa regional de inversión en cuencas hidrográficas llamado Northern Arizona Forest Fund.