Las carrerteras que están deterioradas, congestionadas o con falta de señalamientos le cuestan a los automovilistas de Arizona un total de 9 billones de dólares al año, algo así como 2000 dólares por conductor en el área de Mesa-Phoenix, debido a los altos costos de operación de los vehículos, choques y demoras causadas por los embotellamientos.

Rick Moretti, del National Transportation Research (TRIP, por sus siglas en inglés), una organización sin fines de lucro que se encarga de hacer estudios respecto al estado de las carreteras y del transporte en los Estados Unidos, indicó que la falta de de un sistema que lleve recursos a largo plazo amenaza al estado de Arizona en su posibilidad de mejorar las condiciones de los caminos y puentes, la seguridad en las carreteras y aliviar los congestionamientos y puede ser una limitante para el desarrollo económico de la entidad.

“El Reporte de TRIP nos indica que lo largo del estado, más de la mitad de los caminos que son responsabilidad de la autoridad de Arizona están en pobres condiciones, el rango de fatalidades es el cuarto más alto en la nación, el tráfico de vehículos en Arizona se ha incrementado en un 34 por ciento desde el año 2000, es el sexto rango más alto”, dijo.

Moretti indicó que en el 2018 que ingenieros en varios condados documentaron una alarmante degradación en sus carreteras y que las fuentes de recursos son insuficientes para atender las necesidades.

El informe agrega que los accidentes carreteros en Arizona cobraron la vida de cuatro mil 636 personas entre los años 2014 al 2018. Fue un incremento del 33 por ciento.

Moretti indicó que se promoverá entre los legisladores de Arizona la creación de un impuesto o bien, incrementar el impuesto sobre los combustibles.