Se planea una reapertura gradual de la economía, a partir del 15 de mayo.

La orden de quedarse en casa en Arizona se extendió hasta el 15 de mayo con modificaciones, y se espera una reapertura gradual de la economía entre mayo y junio, en base a las recomendaciones de los Centros de Control de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) anunció el gobernador Doug Ducey.

Esto significa que las tiendas y servicios no esenciales permanecerán cerrados, y se recomienda a los residentes que mantengan el distanciamiento social tanto como sea posible; la orden debía finalizar este jueves 30 de abril.

Desde el inicio de la pandemia, más de 470,000 personas han presentado reclamos de desempleo desde mediados de marzo, agravando la crisis económica.

La fecha tentativa para que los restaurantes puedan atender al público sería el 12 de mayo, algo que se trabaja con los líderes de la industria y siguiendo los lineamientos del CDC.

El Gobernador dijo tener un moderado optimismo con respecto a un regreso gradual y fortalecido de la economía de Arizona y pidió paciencia tanto a empresarios como a trabajadores.

“Se trata de proteger la salud pública y solamente se trata de 15 días más; advierto a quienes no acaten la orden sobre la imposición de multas y la posibilidad de perder sus licencias”, sentenció.

Ducey señaló que se actúa de manera responsable y en base a los datos para un regreso gradual y por fases que permitirá que la economía del estado se reactive y agregó que Arizona fue uno de los últimos estados en aplicar la orden de quedarse en casa y quien más industrias permitió mantenerse abiertas.

“Sabemos que otros estados ya están reabriendo, pero no se trata de lo que hagan ellos, sino de que debemos hacer lo que sea mejor para Arizona y nosotros intentaremos lograr esa reapertura gradual y responsable”, afirmó.

A partir del 4 de mayo, los negocios que involucran la venta de bienes que no se clasificaron previamente como esenciales pueden volver a vender sus bienes en una capacidad limitada, según la orden ejecutiva enmendada de Ducey.

“Hemos evitado lo que ha sucedido en muchas partes de nuestro mundo y nuestro país”, dijo Ducey.

“Tu cooperación está funcionando. Estoy seguro de que podemos decir que hemos visto que la propagación ha sido lenta, y estos han sido logros muy reñidos”.

Al cierre de la edición había 7,202 personas diagnosticadas con coronavirus en Arizona con 304 muertes relacionadas.

Los contagios de COVID-19 presentados por el Gobierno del Estado, aunque continúan a la alza, también demuestran que aparentemente se ha aplanado la curva y empiezan a tender a la baja, como resultado sobre todo del distanciamiento físico.

Ducey afirmó que el sector salud se encuentra en buena posición para hacer frente a la pandemia, con camas y ventiladores suficientes y que en las próximas semanas se busca realizar más de 20 mil pruebas para tener datos más precisos sobre los contagios por medio del programa “Arizona Testing Blitz” y comprobar si el brote se está desacelerando.

La reapertura

Una propuesta enviada al Gobernador por La Alianza de Cámaras de Comercio de Este del Valle ofrece una mejor visión de la reapertura gradual a la que se enfila el estado; consta de tres fases y sigue las recomendaciones del CDC para reabrir negocios y agrega algunos puntos.

La primera fase recomienda que las empresas tengan protocolos de desinfección, practiquen distanciamiento social, instalen protectores contra estornudos y que ciertos empleados, incluidos los que trabajan en tiendas minoristas, salones de belleza y manicura y peluquería, usen máscaras faciales.

Las escuelas y los bares deben permanecer cerrados en la primera fase, mientras que los gimnasios y los lugares grandes, incluidos los restaurantes, los cines, los lugares deportivos y las iglesias, pueden volver a abrirse con estrictos protocolos de distancia y desinfección.

También se recomienda que las visitas a instalaciones para personas de la tercera edad y hospitales continúen prohibidas en esta fase.

La segunda fase para la reapertura de empresas, que comienza el 1 de junio, recomienda que las empresas fomenten el teletrabajo siempre que sea posible.

Se alivian algunas restricciones, mientras que más empresas, incluidos bares y guarderías, pueden reabrir con estrictos protocolos de distanciamiento y desinfección.

Al comienzo de la fase tres, el 15 de junio, se levantaron más restricciones, pero quedaran algunas para industrias especiales, como instalaciones para personas de la tercera edad, hospitales y lugares para eventos masivos.

También se recomienda que se otorguen $ 4 millones en subvenciones a las cámaras de comercio de Arizona para distribuirlas a las pequeñas empresas y un mínimo de $ 10 millones en préstamos para pequeñas empresas que no accedieron a la línea de crédito que el gobierno federal puso a disposición de las pequeñas empresas debido a la pandemia de coronavirus.

Opina Kate Gallego

Hemos visto otras comunidades que reabrieron demasiado pronto y pagaron el precio tanto en salud pública como con un segundo cierre económico. No queremos que eso suceda en Arizona. El aumento de las pruebas y el uso de los datos recopilados para rastrear nuestro progreso en relación con las pautas de los CDC proporciona la ruta más segura hacia adelante mientras navegamos por estas aguas desconocidas.

Todos estamos ansiosos por reabrir la economía tan pronto como sea seguro hacerlo.

Los primeros auxiliares de nuestras ciudades tienen la tarea de llevar a cabo cualquier orden ejecutiva en todo el estado y cuanto más tiempo tengan para prepararse, más posibilidades tenemos de mantener a nuestros policías, bomberos y residentes seguros y saludables.