Según los informes, los Raiders de Las Vegas están dispuestos a permitir que los equipo sde futbol americano de Arizona State (ASU, por sus siglas en inglés) y la Universidad de Las Vegas (UNLV, por sus siglas en inglés) jueguen entre sí en su nuevo estadio Allegiant este otoño, dependiendo de que otro juego se traslade a este lugar.
Está previsto que ASU juegue en UNLV el 12 de septiembre en el Sam Boyd Stadium, que normalmente es el hogar de los Rebels. UNLV está listo para jugar sus juegos fuera de la conferencia allí, pero sus juegos dentro de la conferencia están programados para Allegiant Stadium, el nuevo hogar de los Raiders después de que se muden a Las Vegas desde Oakland.
Ahora, UNLV está tratando de agregar su juego contra los Sun Devils al calendario de juegos en Allegiant.
Los Raiders están dispuestos a hacer esta concesión siempre que el juego de la conferencia de los Rebeldes del 24 de octubre contra Colorado cambie de fecha, informó Mark Anderson del Las Vegas Review-Journal. Como Anderson escribe, mover ese juego de sábado a viernes proporcionaría un día extra de preparación del estadio antes de que los Raiders reciban a Tom Brady y los Buccaneers el 25 de octubre.
La Junta de la Autoridad del Estadio de Las Vegas discutirá el asunto en una conferencia telefónica el jueves 21, informó el Journal.
Ese juego es el único juego fuera de conferencia para los Sun Devils la próxima temporada, que de todos modos podría no jugarse según lo programado originalmente debido al coronavirus. Si la pandemia retrasa la temporada de fútbol universitario, la posibilidad de reorganizar las fechas de fútbol para ayudar a los Raiders podría convertirse en un punto discutible.
De cualquier manera, los otros dos juegos que no son de la conferencia de los Sun Devils son contra el Northern Arizona el 3 de septiembre y BYU el 19 de septiembre. Ambos están programados en Tempe.
