La semana pasada una pregunta inquietaba la cabeza de María Hernández.

María es una joven madre de familia residente del Sur Phoenix, quien hace poco más de un año trajo al mundo al pequeño Lucas.

Como muchas madres primerizas, María ha cumplido al pie de la letra todas las indicaciones que sus proveedores de salud le han dado respecto de su cuidado y el de Lucas, pero apenas hace dos semanas, cuando los casos de COVID-19 aumentaron dramáticamente en nuestra comunidad, esta pregunta ocupó la mayor parte del tiempo en sus pensamientos:

¿Puedo esperar a que pase la pandemia para llevar a mi hijo a sus revisiones médicas y vacunas?

Y es que María, por temor al COVID-19 no programó la revisión anual y vacunas de un año para el pequeño Lucas.

Si bien es entendible el dilema de María y de muchos padres de familia que ante la situación que estamos viviendo piensen dos veces el salir de casa con sus hijos. Es de vital importancia entender que hoy más que nunca es fundamental el proteger a los menores de las enfermedades infecciosas cumpliendo con las revisiones médicas programadas y ayudar así a que los niños crezcan sanos y fuertes.

“Las visitas a las revisiones médicas y la aplicación de vacunas son esenciales para el cuidado de los menores, es la mejor manera de asegurarnos que nuestros hijos están protegidos. Los menores que no son vacunados tienen una mayor posibilidad de adquirir otras enfermedades como el sarampión, la tosferina, varicela, hepatitis, influenza y otras infecciones, por lo que deben de seguir durante la pandemia acudiendo al médico para sus revisiones y vacunas programadas según su edad”, señaló el Dr. Mark Stephan Director Médico de Equality Health.

Es importante también destacar que el no asistir a una cita de revisión médica limita la habilidad del doctor para detectar cualquier anormalidad en el desarrollo físico, social y emocional del menor, lo que reduce la oportunidad de una intervención temprana en caso de algún problema.

La nueva normalidad en el consultorio

Ante la duda y el dilema de María, la joven madre de familia decidió comunicarse con la oficina del pediatra del pequeño Lucas quien forma parte de la importante red de profesionales médicos de Equality Health, esa llamada aparte de tranquilizarla le dio la confianza para programar lo antes posible la cita.

A María se le informó que, como medidas de protección adicionales los adultos en la oficina del doctor utilizarían cubrebocas, las oficinas y consultorios médicos serían esterilizados con mayor frecuencia y que inclusive se separaría a menores que pudieran estar enfermos con los que no, esto último incluyendo hasta el programa citas en diferentes horarios.

Después de hablar a la oficina del doctor, María sintió nuevamente la calma, ya que la información que le proporcionaron le dio la confianza necesaria para programar la visita para la revisión médica anual de su hijo, así como las vacunas que le corresponden recibir al cumplir un año de edad.

“Consideramos que es seguro acudir al consultorio del doctor. Recomendamos hablar antes a la oficina del médico para conocer qué medidas se están tomando y que es lo que usted tiene que hacer al llegar y permanecer en el consultorio”, manifestó el Dr. Stephan.

Debemos recordar que el pediatra es su socio para mantener la salud de su hijo, y que de acuerdo con recomendaciones de la Academia Americana de Pediatría (AAP), las revisiones médicas en persona y vacunas para infantes y menores siguen siendo esenciales.

La AAP también recomienda que los bebés y los niños deben ver al médico para los exámenes físicos, pruebas de laboratorio, exámenes de audición, visión y salud bucal.

Una vez concluida su cita, María fue informada de los posibles efectos secundarios de las vacunas y del servicio de consultas virtuales a través de Telesalud para ciertos tipos de condiciones médicas que no requieran la revisión en persona del infante.

“Creo que es importante tener información la información correcta para tomar nuestras decisiones. Hoy me siento más tranquila de que mi hijo recibió sus vacunas y ya está protegido contra enfermedades. Ahora nos corresponde a nosotros hacer nuestra parte al usar el cubrebocas, mantener la distancia social y salir de casa únicamente para lo necesario”, dijo María.

“Hoy ya entendí que independientemente de la pandemia, el cuidado de la salud de Lucas es una labor que siempre será esencial”.