El presidente Donald Trump se convirtió oficialmente el lunes en el candidato presidencial del Partido Republicano después de que un grupo reducido de delegados se reuniera para una votación nominal en el Centro de Convenciones de Charlotte.
Trump, que había prometido enfocar la Convención Nacional Republicana en una visión más positiva y optimista del país, abrió su discurso como el nominado recién seleccionado atacando a los demócratas por su impulso para expandir el acceso a las boletas electorales por correo en medio de la pandemia en curso.
“No es justo, no está bien y no será posible tabular”, dijo Trump. “Están usando COVID para defraudar al pueblo estadounidense de una elección justa y libre”.
“Están tratando de robarse las elecciones”, continuó Trump. “No dejes que te lo quiten”.
Mientras el presidente hablaba, un asistente pareció gritar un insulto contra el expresidente Barack Obama, y pareció gritar “mono” después de que Trump mencionó el nombre del expresidente.
“Seamos amables”, dijo Trump, provocando la risa de la audiencia. Luego agregó: “Esto solo podría suceder en Carolina del Norte”, antes de continuar con sus comentarios.
El vicepresidente Mike Pence también se dirigió a la convención justo antes de que Trump superara el umbral de 1.276 delegados necesarios para ganar la nominación y les dijo a los partidarios que “Estados Unidos necesita cuatro años más del presidente Donald Trump en la Casa Blanca”.
Trump y Pence estaban en viajes oficiales de la Casa Blanca a Carolina del Norte el lunes, haciendo una visita sorpresa al RNC.
Trump es el primer presidente que pasa por un proceso de destitución, en ser nominado para un segundo mandato. El presidente Bill Clinton tenía su mandato limitado cuando fue acusado, y el presidente Andrew Johnson no consiguió la nominación del Partido Demócrata en la convención de 1868 después de su acusación.
Tanto Johnson, como Trump, evitaron la condena en el Senado.
La convención de Charlotte, que una vez se esperaba que atrajera a miles de personas a la ciudad, se vio obligada a reducirse drásticamente después de la pandemia de coronavirus.
Solo 336 delegados se reunieron en el Centro de Convenciones de Charlotte, seis de cada estado y territorio, para pasar lista estado por estado. A los representantes de cada estado se les concedió aproximadamente un minuto para hablar mientras emitían sus votos para nominar a Trump.
