No solo el muro fronterizo llegaría a su fin si el candidato presidencial demócrata Joe Biden gana en noviembre, sino que también actuaría rápidamente para revertir muchas de las órdenes ejecutivas y acciones de Trump y se trabajaría desde el primer día en una reforma migratoria comprensiva, según el propio candidato y el presidente del Comité Nacional Demócrata, Tom Pérez.
Biden también se ha comprometido a promover una legislación migratoria integral, algo que el Congreso no ha podido hacer desde 1986 y fracasó notablemente en 2013, cuando los republicanos de la Cámara de Representantes rechazaron un proyecto de ley bipartidista impulsado entre otros por John McCain y que había sido aprobado por el Senado.
Pérez afirmó que pese a la oposición republicana, la administración Obama-Biden, en su momento aprobó las actas para los arribados durante la infancia y para sus padres (DACA y DAPA) que fueron retados por los republicanos y al momento DACA ha resistido en las cortes los embates de Trump por abolirlo.
Biden promete restablecer y extender las protecciones para los beneficiarios de DACA, mejor conocidos como “soñadores” y les ofrecería acceso a préstamos federales para estudiantes.
Para la aprobación de una reforma migratoria, Biden debería tener control demócrata también en el Senado Federal, algo probable, aunque no seguro, pero si podría rescindir las órdenes ejecutivas impulsadas por Trump endureciendo la política migratoria.

“Ha prometido comenzar por corregir los errores de la administración Trump y desde el primer día trabajar en una reforma migratoria comprensiva que ofrezca oportunidad a casi 11 millones de inmigrantes indocumentados”, dijo Tom Pérez.
En la propuesta, se impulsarán nuevas leyes y políticas para permitir que más personas ingresen al sistema de inmigración creando una “ruta para la ciudadanía”, siempre que paguen impuestos y pasen la verificación de antecedentes.
“Se restablecerán, ampliarán y optimizarán las protecciones para los ‘soñadores’ y los padres de niños ciudadanos estadounidenses para mantener unidas a las familias en las comunidades que durante mucho tiempo han llamado hogar”, según la propuesta.
Aunque la propuesta de Biden es a menudo criticada por los republicanos, afirmando que dejaría las fronteras abiertas, la realidad es que se buscarían medidas alternativas al muro.
“No se construirá ni un pie más de muro en mi administración, me aseguraré de que tengamos protección fronteriza, pero se basará en asegurarnos de que usamos la capacidad de alta tecnología para lidiar con eso. Y en los puertos de entrada, ahí es donde suceden todas las cosas malas”, ha dicho Biden.
Dentro de los primeros 100 días después de asumir el cargo, Biden revocaría la declaración de emergencia nacional de Trump para construir el muro fronterizo, rescindiría varias prohibiciones de viaje y asilo y a las políticas fronterizas de “Permanecer en México” que impiden que los migrantes que buscan asilo ingresen a Estados Unidos y también eliminaría la prueba de riqueza que la administración Trump ha propuesto para los posibles inmigrantes.
Cambio de política
No todo ha sido a favor de Biden, quien ha enfrentado críticas de defensores de los derechos de los inmigrantes, pues de hecho las deportaciones fueron más altas durante la administración Obama-Biden que en la presidencia de Trump.

Biden ha expresado recientemente su pesar por este enfoque y recientemente admitió que ese enfoque fue un error, al igual que las fallas para llevar a cabo la reforma migratoria, cuando estaban al mando.
“Yo le diría a quienes tiene dudas o se sienten frustrados al respecto que debemos recordar que hubo una propuesta que ya había sido enviada por el Senado que fue rechazada por los republicanos en la Casa de Representantes, pero aún así se formularon decretos para proteger a los ‘soñadores’ y a sus padres”, dijo Pérez.
La propuesta es también que las autoridades de inmigración apuntarían a la deportación solo a los inmigrantes indocumentados a quienes consideran riesgos de seguridad y pondría fin a la detención privada y ampliaría las alternativas de detención y los programas de gestión de casos para inmigrantes.