Mientras el país oficialmente rebasó los 10 millones de infecciones y las 240 mil muertes relacionadas al COVID-19, Arizona no es la excepción y hasta el cierre de la edición los números son de 263 mil contagios y 6,198 fallecimientos, por lo que el gobierno del estado ha decretado alerta máxima previendo que los hospitales pudieran ser abarrotados por pacientes, sobre todo en temporada de influenza.
La preocupación por el rebrote ya afectó al sector educativo, pues varios Distritos escolares e incluso la Universidad de Arizona han retornado por completo a la educación en línea, descartando las clases presenciales, al menos hasta la primavera.
“Nuestro objetivo es proteger la salud pública y mantener nuestra economía abierta y en movimiento de manera segura. Sabemos que ambos son importantes para la salud y el bienestar de los arizonenses”, dijo el gobernador Doug Ducey en su más reciente mensaje.
La noticia de que la farmacéutica Pfzifer pronto podría tener lista una vacuna 90% eficaz, sin duda ha sido una buena noticia, pero sin embargo su producción y distribución todavía tardaría varios meses además de que fue opacada por el anuncio de que sería gratuita sólo para “ciudadanos americanos”.
Doug Ducey anunció que se han invertido $ 150 millones en hospitales para la compra de equipos de protección personal, ventiladores y personal de apoyo, además que se ampliaron las pruebas, con fácil acceso y resultados rápidos.
El gobernador también emitió una Orden Ejecutiva que extiende el Aviso de Vigilancia Mejorada que requiere que los hospitales, laboratorios de pruebas y otras instalaciones de atención médica proporcionen información detallada sobre COVID-19.
El aviso ha requerido que los hospitales y las instalaciones de atención médica en Arizona informen estadísticas diarias sobre recursos de personal, disponibilidad de ventiladores, disponibilidad de camas en la unidad de cuidados intensivos (UCI), disponibilidad de camas para pacientes hospitalizados, niveles de suministro de equipo de protección personal (PPE), niveles de suministro médico y más. . Además, los laboratorios de pruebas continuarán informando los resultados de todas las pruebas de COVID-19.
De vuelta a clases virtuales
En tanto, la Doctora Cara Christ directora del Departamento de Servicios de Salud de Arizona, la Superintendente Estatal de Instrucción Pública Kathy Hoffman y varios altos funcionarios escolares pidieron a las familias que estén seguras durante las vacaciones de Acción de Gracias para ayudar a reducir la propagación cuando los estudiantes regresen, aunque miles de ellos ya no lo harán hasta marzo.
Más escuelas en el Condado de Maricopa pasaron de la instrucción híbrida o en persona a la educación en línea y a distancia, como el Distrito Escolar Primario de Tempe, la Escuela Secundaria Campo Verde en las Escuelas Públicas de Gilbert, la Escuela Secundaria Youngker en el Distrito de Escuelas Secundarias Buckeye Union, el Distrito Escolar Secundario Unión Agua Fria y la Escuela Secundaria Apache Junction.
Igualmente, el gobernador Doug Ducey, en asociación con la superintendente de instrucción pública de Arizona, Kathy Hoffman, anunció 19 millones de dólares en subvenciones específicas para apoyar a las escuelas y los estudiantes más afectados por el COVID-19.
El financiamiento, que proviene del Fondo de Ayuda Educativa de Emergencia del Gobernador (GEER, por sus siglas en inglés) como parte de la Ley CARES, ayudará a las escuelas con el desarrollo de maestros, estipendios para maestros, plan de estudios de lectura y matemáticas, recursos educativos de verano y más.
“A lo largo de la pandemia, hemos trabajado para apoyar a los maestros, asegurarnos de que se satisfagan las necesidades de los estudiantes y mantener seguros a los profesores, los estudiantes y las familias”, dijo la superintendente Hoffman