Se espera que las condiciones de sequía continúen en Arizona durante al menos los próximos tres meses, según las nuevas proyecciones publicadas el jueves por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica.
La NOAA espera que todo Arizona permanezca en una sequía persistente al menos hasta fines de abril, ya que el patrón climático de La Niña, un enfriamiento natural de ciertas partes del Pacífico ecuatorial que generalmente conduce a menos lluvia y nieve en el suroeste, continúa afectando el estado.
Hasta el martes, la mayor parte de Arizona se encontraba en condiciones de sequía excepcionales o extremas, las dos categorías de sequía más intensas de la NOAA.
La precipitación ha sido más difícil de conseguir en el último año en el estado del Gran Cañón que en años anteriores.
Phoenix recibió cinco pulgadas de lluvia en 2020, el vigésimo octavo año más seco desde que se comenzaron a llevar registros en 1896.
Phoenix también pasó 110 días consecutivos sin lluvia en 2020 hasta que esa racha se rompió el 10 de diciembre.
La primera lluvia registrada de 2021 en Phoenix se produjo el martes cuando cayeron 0,01 pulgadas en el Aeropuerto Internacional Phoenix Sky Harbor, el lugar de medición oficial de la ciudad.
Las bajas cifras de precipitación que conducen a la temporada de monzones de Arizona podrían desencadenar una temporada de incendios expansiva, especialmente si la temporada de monzones de este año también es decepcionante.
Metro Phoenix tuvo dos días de lluvia, el 24 de julio con una décima de pulgada y el 20 de agosto con nueve décimas de pulgada, durante la temporada de monzones del año pasado, que se extiende del 15 de junio al 30 de septiembre.
Más de 900,000 acres se quemaron en Arizona en 2020, casi el doble de los 520,000 acres que se quemaron en 3,627 incendios durante los dos años anteriores combinados.