Nogales, AZ Maritza L. Félix y Gustavo Guirado / Conecta Arizona
“De compras, un ratito. Necesito comprar algunas cosas y vamos para allá. Vengo más que nada a acompañar a otras personas”, dijo el mexicano Carlos Quiroz a Conecta Arizona mientras esperaba que la fila de vehículos comenzara a avanzar, a horas de la reapertura de la frontera terrestre entre Estados Unidos y México, el domingo pasado, a la noche. Proveniente de Hermosillo, Sonora, Quiroz explicó la razón –económica- que lo llevó a cruzar y que lo convirtió, a las 00:05 del lunes 8, en la primera persona proveniente de México en pasar en carro hacia esta ciudad estadounidense limítrofe con Nogales, Sonora, en un clima de alegría y fiesta en las calles.
Después de 597 días de estar cerrada al cruce no esencial, la frontera terrestre entre ambos países se abrió en el primer minuto de este lunes 8 de noviembre, un día histórico y esperado por ambas comunidades, especialmente por Nogales, Arizona, que –como las demás ciudades estadounidenses limítrofes con México- sintió en su economía el impacto del cierre fronterizo a causa de la pandemia, el 20 de marzo de 2020. La reapertura, en este sentido, representa la esperanza de una reactivación de los negocios de la mano del turismo mexicano, como señaló el alcalde de Nogales, Arizona, Arturo Garino, quien dijo que la ciudad perdió, en algunos meses, “hasta 700 mil dólares”.
La principal motivación para cruzar este lunes, sin embargo, fue reencontrarse con familiares del otro lado de la frontera. La primera en cruzar por esta razón fue Paula Soto Flores, de 69 años y proveniente de Nogales, Sonora, que cruzó a pie y a quien la esperaban sus hijos del otro lado de la frontera. La mujer, que para estar primera se había formado en la línea a las 6 de la tarde del domingo, explicó a Conecta Arizona los motivos por los que decidió cruzar: “Ver a mis nietos, a mis bisnietos. El amor a la familia. Ahorita me van a esperar (en la garita). El amor a los nietos… las abuelas somos así, pues. Los amo a todos: mis hijos, mis nietos”. La familia de Paula vive en Tucson y no se veían desde el cierre de la frontera en 2020.
Paula ya conocía a sus nietos, a diferencia de una señora que, con la reapertura, pudo conocer a su nieta justo afuera de una reconocida tienda comercial. El encuentro se pareció, por lo emotivo, al reencuentro de dos hermanos que se volvieron a ver luego de la muerte de su padre. Las historias, de todo tipo, podían escucharse en las 5 o 6 filas de vehículos que se formaron para pasar y en el flujo de personas que pasó caminando, aunque en ambos casos las autoridades esperaban una mayor cantidad de residentes, visitantes y turistas. Además, los tiempos de espera para cruzar variaron: a las 8 de la mañana del lunes, por ejemplo, eran de menos de 10 minutos por todas las garitas.
La mayoría de los visitantes entrevistados por Conecta Arizona manifestaron, además, que los agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés), encargados del control en el paso fronterizo, solo les preguntaron si llevaban certificados de vacunación, aunque no se los pidieron. Por ejemplo, aproximadamente a las 3 de la tarde del lunes, un señor vacunado con CanSino, una de las vacunas no autorizadas por Estados Unidos para el cruce y que en México fue aplicada a muchos docentes y educadores, se arriesgó y pasó el control sin que le pidieran el certificado.
Las autoridades habían señalado que los residentes y ciudadanos estadounidenses no necesitan mostrar pruebas de vacunación para ingresar, pero que los extranjeros solamente podrían entrar con el esquema de vacunación completo y con su comprobante (en el caso de los menores de 18 años, no tienen que presentar comprobante de vacunación, pero deben estar acompañados por un adulto vacunado).
Los agentes de CBP, agregaron, están entrenados para traducir e interpretar los comprobantes de vacunación en cualquier idioma, entre ellos en español. Los comprobantes de vacunación deben incluir: nombre completo y fecha de nacimiento que coincida con el pasaporte de la persona que ingresa al país, nombre de la agencia oficial que lo emitió, y fabricante de la vacuna y fechas de vacunación. El comprobante puede presentarse en tarjeta de vacunación o en formato impreso o digital (teléfono celular).
Vacunas
Las vacunas aprobadas por Estados Unidos para cruzar son Pfizer-BioNTech, Moderna, AstraZeneca-Covishield, Sinovac, Sinopharm (todas con dos dosis) y Johnson & Johnson (monodosis). Las no aprobadas, además de la vacuna china Cansino, son Sputnik V (Rusia), Novavax (Estados Unidos), Abdalá y Soberana (Cuba). En enero próximo, incluso los trabajadores esenciales necesitarían mostrar su estado completo de vacunación, señalaron las autoridades.
Del lado estadounidense, de todos modos, los visitantes fueron recibidos en un clima de fiesta: una familia mexicana, por ejemplo, salió a darles la bienvenida con pancartas y hasta con el perro. En medio de bocinazos y expresiones de alegría, dijeron a Conecta Arizona: “Nosotros estábamos acá, esperando el primer paisano”. Ante la pregunta de si extrañaron mucho al turismo mexicano, la respuesta, unánime y a los gritos, fue: “Síiii”.
Ese primer paisano, en su camioneta azul, fue el hermosillense Quiroz, quien no cruzaba a Estados Unidos desde el cierre de la frontera (los pasos solo estuvieron permitidos a los llamados esenciales: residentes permanentes, ciudadanos estadounidenses, diplomáticos, etc). “Tenemos aproximadamente aquí una hora. Tuvimos que hacer una fila en el lado izquierdo para todos los mexicanos, los que venimos de otras partes que no sean de aquí de Nogales (Sonora), para ser los primeros en pasar. Hay que saber cuál es la fila buena, para poder pasar. Estamos aquí en la primera fila”, señaló a Conecta Arizona horas antes del paso.
Con buzo y capucha de tonalidades grises y una visera debajo de la cual se dibujaba la sonrisa de persona famosa solicitada ese día por todos los periodistas, Quiroz dijo que “hubo muy buena armonía aquí de parte de las autoridades de Nogales”. “Son muy accesibles, hemos platicado con ellas y con los policías”, afirmó, con las manos en los bolsillos de su pantalón. Y cuando Conecta Arizona le preguntó qué extrañó en este tiempo que no pudo cruzar, respondió: “Creo que nos dimos cuenta, todos los mexicanos, que podemos hacer grandes cosas, que podemos comprar productos mexicanos”. Aunque no dejó de reconocer que “a lo mejor la cercanía con Estados Unidos” genera el flujo de turistas para realizar “compras por tradición en noviembre, diciembre”, en referencia a las próximas compras por Navidad, por ejemplo.
Ante el oficial de Aduana:
- Explicar verbalmente el motivo del viaje y el estado de vacunación durante una inspección fronteriza.
- Mostrar la prueba de vacunación completa (tarjeta de vacunación o registro en formato impreso o digital ±teléfono celular-).
- No se necesita que los documentos de vacunación estén traducidos.
Los comprobantes de vacunación deben ir
- Nombre completo y fecha de nacimiento que coincida con el pasaporte de la persona que ingresa al país.
- Nombre de la agencia oficial que emitió el comprobante de vacunación.
- Fabricante de la vacuna y fechas de vacunación.
Dónde tramitar el permiso I-94:
- En la aplicación CBP One (de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza).
- En la página web I94.cbp.dhs.gov.
- Presencialmente, al momento de cruzar la frontera.
22 de enero de 2022:
- A partir de ese día, todos los viajeros extranjeros que quieran ingresar a Estados Unidos, por tierra, ferry o avión, por razones esenciales o no esenciales, tendrán que presentar prueba de vacunación completa.
Alerta:
- Cualquier no ciudadano que intente ingresar a Estados Unidos por medios ilegales o sin la documentación adecuada puede ser expulsado o deportado.
Trámites, compras, alegría y visitas a familiares
Compras, turismo, trámites, reencuentro con familiares. Ansiedad, abrazos, alegría. Razones y motivos de todos los colores se pudieron escuchar y ver el lunes, en la reapertura de la frontera terrestre entre Estados Unidos y México, y que permitió a Nogales, Arizona volver a sentir –después de 19 meses- el pulso de quienes cruzaron desde Nogales, Sonora, con una cantidad de historias, planes, expectativas y dólares a cuestas.
“Acabo de cruzar, esperé 15 minutos”, contó Carmen Velázquez y recordó que no cruzaba desde el cierre de la frontera, el 20 de marzo de 2020. “Se me vence mi visa en febrero y me voy a tener que esperar, voy a sacar mi pasaporte mexicano”, explicó al comentar los motivos de su visita a Estados Unidos. ¿Qué extrañaba?, preguntó Conecta Arizona. Carmen suspiró y dijo, entre risas: “Ay, todo. La comida”.
Quien no pudo comer durante horas, mientras esperaba para cruzar, fue Guadalupe Carmona, que hace 36 años vive en Nogales, Sonora, y llegó a la frontera el domingo a las 7 de la tarde. A pocas horas de la medianoche, solo había tomado “un cafecito” y contó que la espera estaba “suave, porque hemos salido a la banquita de los taxistas a descansar”.
Guadalupe señaló que no cruzaba desde el cierre en 2020 y que extraña la familia en Estados Unidos, donde también tiene amigos. De todos modos, confesó que su principal motivo fue porque tenía cita para el martes para realizar un trámite relacionado con la tarjeta SENTRI, una tarjeta de cruce rápido entre Estados Unidos y México, como parte del programa Viajeros Confiables y Frecuentes. “Tenemos cita para pasado mañana (martes), pero como mañana (lunes) va a haber mucha fila, decidimos hacerlo hoy, cruzar hoy (domingo a la medianoche)”, detalló a Conecta Arizona.
Desde la Ciudad de México también estaba en la espera Raúl Estrada, el domingo a la tarde. “Estamos con muchas ganas de terminar de pasar. Hemos tenido muchas palancas para poder salir, desde el primer día no nos dejaron y de esa manera ya no pude salir. Tenemos muchos nietos y algunos no los hemos visto en años. Yo quisiera estar con ellos. Lo digo porque ya no son unos niños. Ya no me queda mucho tiempo y quiero estar para abrazarlos a ellos”, contó a Conecta Arizona, conmovido.
En su carro, por su parte, esperaba el cruce Luz Mercedes Rodríguez, quien iba a visitar a sus familiares a Phoenix, donde viven sus hermanos y primos, a los que no ve hace dos años. “A mi hermana la miré hará unos 6 meses, pero a los demás no los he visto. Siento mucha emoción, sobre todo por volver a unirnos, abrazarnos, porque todo (contacto) fue por teléfono y videollamada. Vamos con mucho gusto para volver a verlos. Hay niños que nacieron y que no los conocemos; queremos ir a conocerlos”, señaló Luz a Conecta Arizona.
“Me voy a quedar una semana, es todo lo que me puedo quedar. Si por mi fuera me quedaría más tiempo, pero no se puede tanto tiempo”, agregó. Y recordó que habían llegado hacía dos horas. “Pensamos que iba a estar más lleno de gente y estamos viendo que los carros están entrando muy fácilmente. Esperemos entrar con facilidad cuando nos toque entrar. Venimos preparados con nuestra cartilla de vacunación y la visa”, detalló.
Luz también recordó que “con tiempo” tramitó en línea su permiso I-94, el formulario utilizado para registrar la entrada y salida de los visitantes extranjeros a Estados Unidos. El trámite online puede realizarse en la aplicación CBP One (de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza) o en la página web I94.cbp.dhs.gov