Una jueza en Texas bloqueó temporalmente la directiva del gobernador republicano Greg Abbott que busca que padres o representantes de niños transgénero sean investigados por abuso infantil, cuando son denunciados porque sus hijos han recibido terapias de afirmación de género.
La directiva del gobernador y la opinión del fiscal general que la precedió van en contra de la posición de importantes organizaciones médicas nacionales, como la Asociación Americana de Medicina. La Academia Americana de Pediatría expresó su “fuerte oposición” a la directiva de Abbott por representar una “amenaza directa a la salud y el bienestar” de los menores transgénero.
El viernes en la tarde, la jueza de distrito Amy Clark Meachum emitió una orden judicial, con alcance en todo el estado, que detiene las investigaciones del Departamento de Servicios Familiares y de Protección (DFPS, por sus siglas en inglés).
Anteriormente, ya había dado una orden que impedía que la familia demandante sea investigada. La querella fue presentada por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU por sus siglas en inglés) y Lambda Legal, una organización de defensa de los derechos LGBTQ, en nombre de la familia de una joven transgénero de 16 años cuya madre trabaja para DFPS. Según la agencia, se han abierto nueve casos desde que Abbott emitió la directiva.
Reacción del fiscal general
Poco después de que la orden de la jueza Meachum se diera a conocer, el fiscal de Texas, Ken Paxton, anunció que apelaría y que, al hacerlo, la directiva podría continuar. Sin embargo, abogados de los demandantes le aseguraron al Dallas Morning News el sábado que la apelación “no tiene fundamento” y que lucharán para que el bloqueo siga vigente.
“Como sabemos, el fiscal Paxton tiene un historial problemático cuando se trata de cumplir con la ley”, dijo Paul Castillo de Lambda Legal.
Agregó que si una familia es investigada por DFPS “a pesar de la decisión de la corte”, esta debe comunicarse con el centro de ayuda de Lambda Legal o la ACLU de inmediato.
Al emitir su decisión, Meachum señaló que al introducir la nueva directiva sin que se haya pasado una ley o regla, el gobernador “viola la separación de poderes” al invandir el espacio legislativo.
Rebekah Bryant está muy molesta porque el gobernador de Texas emitió una directiva por la cual podrían investigarla si deciden que su hija Sunny, quien actualmente tiene 8 años y es transgénero, necesita un tratamiento hormonal cuando llegue a la adolescencia.