El gobernador Doug Ducey quiere un gran cambio en la ley estatal que, según él, debería hacer que las personas conozcan el resultado de todas las contiendas disputadas en la noche de las elecciones o poco después.
El gobernador republicano, luego de participar el lunes en la certificación formal o escrutinio de los resultados de las elecciones de noviembre, dijo que tiene confianza en las elecciones de Arizona. Él y otros funcionarios estatales firmaron el papeleo declarando formalmente a los ganadores.
Esos ganadores incluyen a la secretaria de Estado demócrata Katie Hobbs, quien derrotó a la republicana Kari Lake en la carrera para suceder a Ducey como gobernador. Pero Lake, junto con algunos otros candidatos perdedores, ya dijo que aprovechará la ventana de cinco días después del escrutinio para pedirle a un juez que anule los resultados.
“Creo que las hacemos bien”, dijo Ducey sobre las elecciones. Pero dijo que hay cosas que se pueden hacer para aumentar la confianza de los votantes.
En particular, dijo que eso implica obtener la finalidad más rápido.
Ducey dijo que las personas que quieran dejar sus boletas anticipadas en los lugares de votación el día de las elecciones deberían poder abrirlas y contarlas allí junto con los que votaron ese día. Ahora, los condados envían esas “boletas tempranas tardías” sin abrir a una ubicación central donde las firmas en los sobres deben compararse con las que ya están en el archivo.
Solo después de que eso sucede se abren los sobres y se cuentan los votos. Ese proceso, que puede demorar días, ocurre solo después de que se cuentan todas las demás boletas.
Los comentarios de Ducey siguieron a las afirmaciones de Lake de que los funcionarios electorales estaban retrasando deliberadamente el conteo para retrasar la declaración del ganador, que según ella sería ella.
“Están retrasando los resultados y están tratando de retrasar lo inevitable”, dijo a Newsmax tres días después de las elecciones.
Al final resultó que, la certificación firmada por Ducey y otros el lunes muestra que Lake perdió ante Hobbs por más de 17,000 votos.
El proceso de certificación, que también involucró al Secretario de Estado Hobbs, al Fiscal General Republicano Mark Brnovich y al Presidente del Tribunal Supremo Republicano de Arizona, Robert Brutinel, transcurrió sin incidentes.
“Pero me gustaría que decidiéramos el ganador el día de la elección, (o) el día siguiente en una carrera altamente competitiva, o lo más cerca que podamos”, dijo Ducey.
Descartó las preguntas de si un sistema de este tipo podría entorpecer el proceso, lo que daría lugar a filas más largas en los lugares de votación, ya que las personas que solían simplemente dejar sus sobres de boletas anticipadas en las urnas y marcharse ahora tendrían que presentar una identificación y luego abrir sus sobres de boletas. .
“Ese es el precio de ser ciudadano y querer participar”, dijo.
Mientras las contiendas estén reñidas, las controversias continuarán, dijo Ducey, a quien, según los límites de mandato estatales, no se le permitió postularse este año para un tercer mandato.
Hacer que las boletas electorales anticipadas de último minuto se cuenten de inmediato significaría que los condados estarían “mucho más cerca del 100% de los votos contados al cierre de operaciones”.
Desafíos legales esperados
Los condados del estado certifican sus propios resultados electorales, que luego se envían a la Oficina del Secretario de Estado. El escrutinio del lunes no es la última palabra sobre los resultados de las elecciones, sino que simplemente pone el reloj en marcha para lo que se espera que sean varios desafíos legales al resultado.
