Para más información sobre crianza temporal y adopciones llamar al (602) 943-384; o en el portal de Caridades Católicas www.catholiccharities.org

De acuerdo al Departamento de Seguridad del Menor de Arizona (DCS, por sus siglas en inglés) en enero de este año 10,753 niños estaban bajo su cuidado y 3,682 de estos niños eran hispanos, el más alto de todos los grupos demográficos, mientras que sólo había 3,024 hogares que ofrecieron acogida.

Por su parte Caridades Católicas, una agencia no lucrativa que ayuda en los trámites y procesos de adopción, hace un llamado a la comunidad latina para que se interese y se informe más sobre este asunto, pues tal vez les nazca la idea de adoptar a alguno de esos pequeños.

“A los niños se les ingresa al cuidado de crianza por causas ajenas a ellos; hay muchos de ellos que son hermanos y quieren permanecer juntos, son a veces casos tristes y seguramente hay familias que pudieran ofrecerles hogar temporal”, dijo a PRENSA ARIZONA Rebecca Domínguez, representante de dicha entidad.

Recalcó que Caridades Católicas brinda educación, entrenamiento y apoyo a los padres que han sido aprobados para brindar cuidado de crianza a los niños.

Manifestó la entrevistada: “Esto significa que caminamos junto a los padres de crianza temporal, para que tengan los recursos que necesitan para tener éxito”.

Tras comentar que el tiempo promedio que tarda el trámite de adopción es de 12 a 18 meses, Domínguez reveló que en 2022 que Caridades Católicas en el condado de Maricopa, proporcionó estabilidad a través de la adopción a 50 niños.

En un artículo reciente, PRENSA ARIZONA publicó parte de un reporte del DCS correspondiente al 2021, sostiene que “la mayoría étnica de los niños en cuidado fuera del hogar son hispanos (28,2%) y caucásicos (27,2%); asimismo, que los niños afroamericanos representan el 5,0 % de la población, pero el 14,8 % se encuentra bajo cuidado fuera del hogar.

Según la agencia gubernamental, en su “hotline” para reportar abusos contra menores recibió 21,191 llamadas que cumplieron con los criterios legales para hacer un reporte de los hechos.

Testimonio conmovedor

Rebecca Domínguez quiso compartir su blog con los lectores de PRENSA ARIZONA, donde narra algunas de sus experiencias como padres temporales, mismo que aquí reproducimos:

“Ser padre adoptivo es difícil. Abres tu hogar a un niño, pero también a sus padres, al DCS, a los trámites de licencias y algo de escrutinio. Esto asusta a mucha gente de ser padres adoptivos. Pero hay otro lado que no verás hasta que seas un padre adoptivo. Mi esposo y yo concluimos recientemente nuestro tiempo de cuidado temporal. Y con ese cierre viene mucha reflexión. En general, sentimos que nuestro tiempo como padres de crianza fue positivo. Tuvimos nuestros altibajos. A veces nos preguntamos ¿Por qué estamos haciendo esto?

La respuesta es simple: Sin nosotros, estos niños no tendrían a nadie. Los niños en cuidado de crianza están atrapados en un sistema que toma muchas decisiones por ellos, tienen miedo y extrañan a sus padres y hermanos. Necesitan un defensor fuerte y un lugar suave para aterrizar.

Mi esposo afirma que dejamos de lado nuestros propios sentimientos por nuestros hijos adoptivos. Tu corazón se romperá. Pensando en retrospectiva, no recordamos a los trabajadores o casos difíciles. No recordamos instantáneamente lo negativo de los sentimientos.

Logan tenía 2 años y estuvo con nuestra familia durante 6 meses, cuando recibimos una llamada de que se mudaría con sus abuelos. Nuestra familia lloró cuando lo llevamos a la casa de sus abuelos. Una vez allí, los abuelos de Logan y algunos primos lo esperaban felices. Logan soltó mi mano y corrió a sus brazos. Estaba encantado de verlos. Cuando me iba, la abuela me detuvo y me dio un fuerte abrazo. Con lágrimas en los ojos, me dijo lo agradecida que estaba por cuidar tan bien de Logan. Ella había estado tan preocupada por él. Recuerdo haber olvidado mi propio dolor en ese momento. Ella amaba a Logan, y de repente me di cuenta de la importancia de la reunificación. La cara radiante de Logan confirmada pertenecía a su familia.

Hannah estuvo con nosotros durante más de un año. DCS preguntó si estaríamos dispuestos a adoptarla y dijimos que sí. A medida que el caso se acercaba a la separación, DCS localizó al tío de Hannah, Chris que tenía 21 años; trabajaba en un restaurante de comida rápida y esperaba su primer hijo. Esta información hizo que mi esposo y yo quedáramos muy nerviosos. Nos enfocamos en todos los riesgos y razones de por qué Chris no era ideal colocación. Quedamos en encontrarnos con Chris. Cuando llegamos a nuestro lugar de reunión, recogió a Hannah y comenzó a llorar. Explicó que había perdido el rastro de su hermana y de Hannah. Tenía miedo por ellos porque su hermana luchó contra la adicción. No sabía que Hannah estaba en cuidado de crianza hasta que DCS pudo localizarlo Después de esa visita, nos quedó claro cuánto amaba Chris a Hannah. Aunque era joven y recién comenzando, Chris conocía la historia del nacimiento y la historia familiar de Hannan, y lo que es más importante, la amaba. Hannah le pertenecía y se convirtió en una extensión de nuestra familia.

Mi esposo y yo criamos por 8 años y cuidamos a 19 niños. En ese tiempo, no arreglamos un roto sistema, nuestros corazones se rompieron muchas veces, y muchas veces nos sentimos derrotados. Pero también hemos ayudado a sanar y reunir familias. Hemos conocido familias increíbles para siempre y hemos participado en la creación de nuevas familias a través de la adopción. De esto se trata realmente el cuidado de crianza”.