El comandante de Fort Hood del Ejército de Estados Unidos será destituido de su cargo y ya no asumirá el mando de una división en Fort Bliss, según un comunicado del Ejército de Estados Unidos publicado el martes.
El mayor general Scott Efflandt estaba listo para hacerse cargo de la 1.a División Blindada pronto, pero ahora el Ejército anunciará quién se hará cargo de la división en los próximos días.
El comandante de división es un paso crítico en la carrera de un general del Ejército y perder una división puede ser un movimiento que ponga fin a su carrera.
Fort Hood ha estado plagado de una serie de incidentes y dos soldados, entre ellos la especialista Vanessa Guillén, desaparecieron solo para que sus cuerpos fueran descubiertos más tarde.
Otros soldados asignados a la base fueron arrestados en un operativo de prostitución y varios más, se han suicidado recientemente.
El comandante general del Comando de las Fuerzas de Estados Unidos, el general Michael Garrett, ordenó al general de división John Richardson IV que asuma el mando en Fort Hood a partir del miércoles y Efflandt permanecerá en Fort Hood por el momento, sirviendo como comandante general adjunto de apoyo.
El general Garrett nombrará al general John Murray, comandante general del Comando de Futuros de Estados Unidos, para “dirigir una investigación en profundidad sobre las acciones de la cadena de mando relacionadas con la especialista Vanessa Guillén”, dice el comunicado.
El Ejército ya tiene varias investigaciones abiertas en Fort Hood, y ahora la investigación del General Murray agregará esos esfuerzos a una visión más amplia del liderazgo de la base.
