El Departamento de Servicios de Salud informó de 8,099 casos positivos y 229 muertes adicionales relacionadas al COVID-19, lo que aumentó los números de la pandemia a 708,041 contagios y 12,001 muertes.
El aumento actual ha abarrotado los hospitales en todo el estado, particularmente después de las vacaciones de invierno, pero el número de casos adicionales reportados y de personas hospitalizadas por COVD-19 ha disminuido ligeramente en los reportes recientes.
Arizona también fue un punto caliente durante el primer pico de la pandemia el verano pasado.
Arizona está aumentando su programa de vacunación al abrir sitios adicionales pero, al igual que otros estados, ha tenido dificultades para obtener las dosis suficientes para satisfacer la demanda.
Se reportaban 4,495 pacientes con COVID-19 ocupando camas de hospital para pacientes hospitalizados en Arizona hasta el jueves, por debajo del récord de la pandemia de 5,082 el 11 de enero, según el panel de control de coronavirus del estado.
Una persona de cada 141 residentes de Arizona fue diagnosticada con COVID-19 durante la semana pasada.
Se cree que el número de infecciones es más alto de lo que se informó porque muchas personas no se han hecho la prueba y los estudios sugieren que las personas pueden infectarse con el virus sin sentirse enfermas.
Según datos de la Universidad Johns Hopkins y The COVID Tracking Project, el promedio móvil de siete días de casos nuevos diarios en Arizona disminuyó en las últimas dos semanas, pasando de 9,198 casos nuevos por día el 7 de enero a 7,271 casos nuevos por día en Jueves.
Mientras tanto, el promedio móvil de siete días de muertes diarias del estado en Arizona continuó aumentando, pasando de 125,3 por día el 7 de enero a 153 el jueves.
