Grupos activistas como Poder in Action celebran la aprobación de un Comité Civil de Vigilancia al Departamento de Policía.

El Concilio Municipal de Phoenix aprobó por poco la propuesta del concejal Carlos García con respecto a una nueva supervisión civil del Departamento de Policía de Phoenix.

Por un voto de 5-4, los miembros del Consejo Laura Pastor, Betty Guardado, Carlos García, Michael Nowakoski y la alcaldesa Kate Gallego eligieron el Modelo B, el cual está basado en una investigación independiente donde los miembros de la comunidad tienen prioridad en la redacción de políticas y el proceso de implementación de las mismas.

Designado como Modelo B, el plan de García crea “dos nuevos grupos (una Junta de Revisión de la Comunidad y la Oficina de Responsabilidad y Transparencia) que son independientes del Departamento de Policía e impulsados por la comunidad, transparentes en su trabajo al público y de investigación en sus funciones.

La aprobación del Modelo B ocurrió después de que el Consejo rechazó el Modelo A, el curso de acción favorito de la Alcaldesa Kate Gallego.

La propuesta preferida de Gallego habría reunido tanto a una Junta de Relaciones con la Comunidad como a un Defensor del Pueblo de la Policía Civil, este último equipado con un personal completo para monitorear y auditar la supervisión.

“Por décadas la Ciudad de Phoenix ha estado en pláticas para la creación de un consejo que vigile las acciones del Departamento de Policía, fui la primera alcaldesa en ponerlo a votación y eso sucedió en la sesión del Concilio del martes 25, pasó, y estaremos creando un Comité Vivil que se encargue de ver que nuestro Departamento Policía trabaje con eficiencia y transparencia, tenemos aún mucho trabajo por hacer y tenemos que estar juntos en este proceso el cual tenemos que llevarlo de la mejor manera” dijo Gallego.

“Yo estoy orgullosa de nuestro Departamento de Policía, de su trabajo y quiero apoyar este esfuerzo para incrementar la confianza y transparencia en su labor”, comentó, la alcaldesa Kate Gallego cuando dio el voto que favoreció el Modelo B, propuesto por el Concejal Carlos García.

Las reacciones de los concejales no se hicieron esperar, como la de Michael Nowakowski, quien manifestó su beneplácito por que esta propuesta fuera aprobada.

“En 2010, voté por 15 recomendaciones desarrolladas por la Comunidad y la Iniciativa de Fideicomiso de la Policía. La recomendación 14 era que la ciudad creara una Junta de Revisión Civil. Después de 10 largos años, estoy muy orgulloso de apoyar la moción esta noche para hacer esa de esa junta de revisión una realidad”, manifestó.

El concejal por el Distrito 7, recordó que durante su servicio con cuatro alcaldes, hubo muchas pláticas previas, hasta llegar a este punto, aunque indicó que el plan puede mejorarse.

“He servido con cuatro alcaldes diferentes y durante años he estado trabajando para llegar a un punto en el que nuestros residentes tengan una voz importante en el proceso. Esta noche, eso sucedió. Quiero agradecer al alcalde Gallego y al concejal García, puede que no sea perfecto, pero debido a ellos, tenemos un plan”, afirmó.

“La alcaldesa mostró un verdadero liderazgo al permitir que el concejal García presentara el Modelo B como una opción y también quiero agradecer a los líderes de la ciudad por su trabajo en esto. Espero adoptar el enfoque de ‘Equipo Phoenix’ con la comunidad, la Policía de Phoenix y el personal del Ayuntamiento para asegurar que este voto trascendental proporcione el tipo de transparencia y supervisión que nuestra comunidad espera”, finalizó.

El concejal conservador Sal DiCiccio, fue uno de los cuatro miembros que votaron en contra, y advirtió sobre el riesgo que se corre con la puesta en marcha de este plan.

“Lo que Phoenix hizo hoy fue aprobar el plan más radical, extremista y anti policial de todo el país. Va a poner en peligro la vida de nuestros ciudadanos”, aseguró.

Carlos García, principal impulsor de la propuesta comentó:

“Esta propuesta se basó en miembros de la comunidad que se organizaron contra la violencia policial y lleva el peso de más de 230 personas que han sido baleadas por la policía de Phoenix en la última década, y las innumerables personas que han sido perjudicadas de formas que nunca sabremos”, finalizó.