Trump vino a Phoenix a “agradecer” a la compañía Honeywell por su esfuerzo en la fabricación de máscaras protectoras durante la pandemia del Covid-19, aunque fue además como un acto de campaña en pequeño.

Arizona, un estado tradicionalmente republicano y conservador, es también uno de los más probables en cambiar de color durante las elecciones del 2020, según las encuestas más recientes, que muestran un creciente apoyo a los candidatos demócratas en muchas de las posiciones a disputarse.

En punto de las 12:15 de mediodía del pasado martes 5 de mayo el Air Force One tocó tierra en el aeropuerto Sky Harbor, ante los aplausos de los pocos seguidores del presidente Trump que se encontraban en los alredodores de la pista de aterrizaje.

El presidente Donald Trump llegó para visitar una fábrica de mascarillas en Arizona, demostrando su determinación de ver al país avanzar hacia la actividad normal incluso cuando el coronavirus sigue siendo una amenaza.

“La gente de nuestro país debería pensar en sí mismos como guerreros. Tenemos que abrir”, declaró mientras salía de Washington en un viaje que tenía más con un retorno a la campaña hacia la reelección.

Después de más de un mes encerrado en Washington, Trump pasaría menos de dos horas y media en el suelo en Phoenix, recorriendo la fábrica de Honeywell que elabora máscaras N95 y organizando una mesa redonda sobre temas de los nativos americanos.

Los asistentes dijeron que valdría la pena las casi ocho horas de tiempo de vuelo como un espectáculo simbólico de que la nación está comenzando a reabrir; se esperaba que el viaje fuera un marcador del regreso de Trump, ya que espera que la nación también comience a emerger de siete semanas de aislamiento impuesto por el virus.

“Los estados están en manos de los gobernadores están en sus manos, pero nuestro país quiere abrir”, dijo Trump, sobre la necesidad de volver a la normalidad, incluso cuando el virus continúa propagándose.

Trump ve el renacimiento económico como un nacesidad política, ya que sus aliados han notado una erosión en el apoyo al presidente en las últimas semanas tras la estrepitosa caída de la economía, que antes de la pandemia era su carta fuerte.

Los republicanos creen que el camino de Trump hacia un segundo mandato depende de la percepción del público de la rapidez con que la economía se recupera de los cierres destinados a frenar la propagación del virus.

La visión de Phoenix

Al comienzo de la pandemia, antes de que la mayoría de los Estados Unidos reconociera el alcance de lo que enfrentaría, Honeywell se estaba preparando para poner en marcha dos nuevas ubicaciones de fabricación, incluida una en Phoenix, que producirían más de 20 millones de máscaras faciales N-95 críticas por mes.

™Phoenix ha sido convocada antes para fabricar productos que salvan vidas para nuestro país∫, dijo la alcaldesa de Phoenix, Kate Gallego.

™Tenemos una fuerza laboral de fabricación excepcional. Nuestra historia hace que Phoenix sea atractiva para la expansión de fabricación. Es toda una historia de cooperación entre la ciudad y Honeywell para abrir su línea de fabricación en un tiempo récord. La dedicación y el compromiso del personal de la ciudad y Honeywell lo hicieron posible∫, agregó.

En los últimos años, el Alcalde y el Concilio de Phoenix han aprobado nuevos programas de inspección y permisos diseñados para reducir la revisión y permitir los plazos de emisión.